Visitamos uno de los parques industriales más emblemáticos del distrito de Esteban Echeverría, el de Luis Guillón, aquel que fuera sido creado por Siro Comi y que anteriormente había sido territorio de angares de aviones de mediano porte y que allá por los años ´90 se fue conformando como espacio industrial.
Para conocer detalles del avance de este parque conversamos con Andrés Comi, hijo de Don Siro y actualmente a cargo de la administración del desarrollo que nos contó cómo se fue dando la idea de especializar los galpones que existían en el predio que había sido un aeródromo, para alquilarlo a empresas, y de a poco, a partir de este inicio fuera cobrando forma de Parque Industrial.
«Este es un parque privado dedicado a la construcción de galpones para empresas. Actualmente el parque cuenta con unas 35 empresas dentro del predio, la mayoría de ellas han crecido; se han iniciado en espacios de 1500 metros cuadrados y luego se han ido ampliando; particularmente, tenemos el ejemplo de empresa que hoy ha alcanzado los 11 mil metros cuadrados», refirió el responsble, al dar detalles sobre el crecimiento que se va dando dentro de este tejido industrial pyme.
En el parque Industrial Luis Guillón, conviven rubros muy variados, desde inyección de plástico hasta empresas autopartistas, una mueblería, una fábrica de colchones, también de robótica. «Esta está considerada una zona industrial I2, por lo que no se puede instalar ninguna empresa que produzca algún contaminante; todas las empresas que se encuentran en el predio no emanan contaminantes, ni olores de ningún tipo.
Respecto a la configuración de su estructura común, la mayoría de las empresas cuando nació el parque industrial se fueron ubicando sobre el perímetro externo, esto incluye las calles Luciano Vallette, Dora Fleitas y Luis de Sarro, y Bruzzone.
«Una vez que se completó ese perímetro externo, dentro del cual cada empresa tenía su acceso propio, se empezó a construir dentro del parque industrial, para ellos se realizó una calle interna que se construyó a la altura de Bruzzone al 1100, y naturalmente surgieron dos frentes de uno y otro lado del parque, y se fueron construyendo los últimos galpones, siempre sobre esa calle interna», indicó Andrés Comi.
La historia de los inicios del parque está ligada a un esfuerzo de imaginación, inicialmente, para sostener el histórico predio, que alrededor de la década del ´40 era un notorio aeródromo; allí existían unos cuatro galpones que eran los hangares, «cuando dejan de funcionar los aviones en dicho aeródromo, mi padre (Siro Comi), se encuentra con que tiene que pagar los impuestos del lugar que estaba fuera de funcionamiento, de una forma que no tenía prevista decide alquilar primero uno de esos hangares a una empresa, que entonces hacía cartón corrugado, y con lo que recaudaba de ese alquiler pagaba los impuestos, de esa forma, al ver que eran espacios requeridos, sucesivamente fue alquilando el resto de los galpones. Así fue cómo se gestó», cuenta el representante del parque. Esto ocurrió alrededor de los años ´80, ya hacia la década del ´90, al ver que funcionaba el negocio, el emprendedor se lanzó a hacer un galpón más y luego, galpón tras galpón fue creciendo el parque. “En este último año y medio sumamos dos galpones más de 1500 metros cuadrados cada uno, y ya incorporamos dos nuevas empresas”, expresó Andrés Comi. “Actualmente todos los galpones están completos, el parque se encuentra en gran parte de su capacidad ya construida, queda espacio, pero estamos debatiendo si hacemos un galpón más o forestamos naturaleza al predio”, señaló su representante.
Sobre cómo evidencian el crecimiento en estos años, Comi reconoce que “no esperábamos que al día de hoy fuéramos tantas empresas, por tal motivo luego de estas dos últimas obras que realizamos, decidimos ahora parar de construir para realizar algunas mejoras internas que ayuden a la dinámica del funcionamiento de todas las empresas del parque; por ejemplo construiremos dársenas de giro para que los camiones de gran porte que entran puedan articularse mejor en el ingreso y en la salida; también empezamos a pensar qué calles internas podemos conectar, para por ejemplo, facilitar que si una empresa que alquila un galpón en un sector del predio necesita más espacio y nosotros, tenemos libre otro galpón en otro lugar del parque industrial, permitirle que a través de calles lleguen cómodamente de un lugar a otro», expresó Andrés Comi, quien señaló que estos son los proyectos para 2024.
Respecto a la vinculación entre las empresas que funcionan en el parque, señaló que “a lo largo de este tiempo han surgido sinergias entre las empresas que cohabitan en el parque, aquí conviven empresas de logística con empresas productoras y entonces se genera ese vínculo.
Y luego se genera otro con el barrio, principalmente en lo que tiene que ver con la gastronomía, ya que ha empezado a abastecer a la gente que trabaja dentro del parque, entonces de alguna manera las personas de la comunidad circundante también prestan servicios a las empresas; esto permite de alguna manera que se contagie ese desarrollo al barrio.
Ya sea de forma directa o indirecta la presencia del parque permite eso, y eso para nosotros tiene mucho valor y mucha importancia», expresó Andrés Comi. Respecto de proyecciones próximas, señaló que «en lo sucesivo estamos pensando en trabajar también en la cosmética del Parque Industrial; hace un tiempo habíamos trabajado en el perímetro, instalamos metal desplegado pesado, que está recambiado en un 80 por ciento; esta obra cambia la vista y ha mejorado la contención del predio; hemos pintado los postes el perímetro, queremos que el parque industrial se vuelva un ícono del orden, que se proyecte de adentro hacia afuera», expresó.
Por otra parte, desde el Parque Industrial mantienen un vínculo solidario con instituciones de distrito, «nosotros todos los meses intentamos colaborar con instituciones del distrito, somos proveedores de papel de la policía de Luis Guillón y del área de Lucha Contra el Narcotráfico en Ezeiza; también todos los años nos reunimos con Bomberos Voluntarios, este año hemos conseguido dos escaleras telescópicas; intentamos estar e intentamos ayudar», dijo el empresario.
Respecto a la permanencia de las empresas que se instalan en el Parque Industrial Luis Guillón, a los largo del tiempo, nos cuenta que «esas que se han instalado, generalmente se han quedado. Tenemos empresas que están hace más de 10 años, nuestro criterio es que aquellas que se instalen, cuando llega el momento de renovar se puedan quedar, a veces hay situaciones especiales, en las que un rubro específico que por la alta competencia no han podido sostenerse, pero tenemos más empresas que permanecen en el tiempo», expresó.
El Parque Industrial de Luis Guillón tiene historia, la épica como aeródromo luego reconvertido a espacio productivo territorial la convierten en un ícono, la historia recuerda que en la década de 1940 salieron desde allí los primeros vuelos a las Islas Malvinas. «Para nosotros es un orgullo poder compartir la continuidad de este predio, de este proyecto y del crecimiento de esta zona industrial», destacó Andrés Comi.