Esteban Echeverría tiene una desarrollada faceta industrial de alta performance, de carácter competitivo que alberga algunas de las firmas más importantes del mundo en materia de logística, pero también tiene un potencial Pyme que se instala con solidez en el área; una parte de ellas se encuentran en el Parque de Guillón Siro Comi. Ahí estuvimos.
Hablamos con su fundador, el señor Siro Comi, quien nos dio detalles del funcionamiento del parque, del modelo de gestión familiar y del perfil industrial de la zona.
Una de las tantas mañana de este mes de julio, recorrimos el predio Siro Comi, conocido como el Parque Industrial de Luis Guillón, un sector industrial con más de 20 hectáreas enclavado en Esteban Echeverría.
Ubicado en un punto estratégico entre Luis Guillón y Monte Grande, se presenta con un modelo de negocio que ofrece locaciones industriales en un plan que se ajusta a las necesidades de Pymes que se inician y que priorizan invertir su capital en la compra de maquinarias y no tanto en comprar un terreno y construir una nueva planta.
Todo surge como una idea, o más bien como una visión de negocios, en la década de 1980. Don Siro vio la posibilidad de emprender este modelo, bastante común en otras partes del mundo donde el costo de la tierra era y continúa siendo mayor que en Argentina. Así decidió la puesta en valor del predio de Luis Guillón, que antiguamente fuera un campo de aviación y que en por ese entonces estaba inactivo. “Se me presentó la oportunidad de empezar con los hangares como locación Industrial. Era entonces un gran esfuerzo porque estábamos rodeados de calles tierra, Vallette –ex Fair- aún era de tierra al igual que Bruzzone, solo había un acceso de mejorado por la calle Sardi”, cuenta Siro Comi sobre los inicios del perímetro que más tarde fue formalizado como Zona Industrial por parte del municipio, nominación que mantiene hasta la actualidad.
Desde entonces hasta el presente, han incorporado empresas que han llegado por el boca en boca: “Una de las empresas históricas, que fue de nuestros primeros clientes, hoy sigue siendo parte del parque. No son comparables las instalaciones que teníamos entonces, que eran muy pequeñas. Hemos incorporado una buena cantidad de empresas permitiéndonos crecer con este sistema que nosotros utilizamos de construcción a medida y que ha dado buenos resultados; ha funcionado muy bien”, asegura Comi.
Sobre el perfil de las empresas, afirma que este es diverso aunque el 80 por ciento de las firmas que se instalan allí son nacionales, muchas de las cuales se encontraban en enclaves urbanísticos. “Casos de empresas con tres medianeras que no les permitían crecer y se enteraron de nuestra alternativa. Este espacio les permite crecer; a nosotros nos interesa que cada empresa crezca”, afirma Siro Comi, al indicar que hay micro emprendimientos, trabajo artesanal, empresas diversas, abarcando una enorme variedad de rubros. “Nuestro éxito es el boca a boca lo que nos permite tener un perfil heterogéneo”, sostiene.
“Acá nacen muchas empresas; acá el individuo no debe comprar el inmueble; con muy poco capital el empresario puede arrancar por lo que toda su inversión y todo su esfuerzo está puesto en su maquinaria para producir. Muchas veces una empresa que tiene que comprar un inmueble, hablando claramente de una empresa que se está iniciando y no de una empresa grande que puede comprar, claro. Tenemos casos de empresas que arrancaron, se potenciaron en el filón del momento y luego volcaron todo su esfuerzo capital en maquinarias por lo que explotó su crecimiento. Esta es la alternativa más importante que brindamos”.
Las locaciones se desarrollan sobre el pedido de cada cliente: “nos piden mil metros, entonces como tenemos todavía espacios libres, hacemos el desarrollo de esos mil metros, pero dentro de un predio de tierra importante que le permita el día de mañana crecer. Esto es muy interesante porque en momentos de desarrollo o crecimiento pueden expandirse, agrandar la fábrica sin necesidad de parar su producción; acá tenemos ejemplos de gente que hoy tiene más de 9 mil metros cubiertos y que arrancó con 1800 metros”, refiere el empresario sobre el modelo de negocio; “la norma es que eventualmente una empresa necesite un 20 o 30 por ciento de espacio más y lo puedan hacer por esa comodidad de disponer del terreno”, y agrega: “nosotros hacemos toda la inversión edilicia y después se lo brindamos a la empresa en locación a valor del mercado. Estamos hoy en una zona sumamente competitiva por el perfil de toda la región; estamos cerca del Parque de Ezeiza y el de Canning; también está el de 9 de Abril, el de Spegazzini y más alejado el de Cañuelas; nuestra variante de negocio nos ha permitido crecer en un momento de alta competencia”, asegura.
La superficie del parque es de alrededor de 21 hectáreas, y se encuentra ocupada en un 70 por ciento técnico, respetando los espacios libres de cada galpón y cuenta actualmente con 43 empresas que van desde micro emprendimientos hasta Pymes de envergadura.
En cuanto a la actualidad que las industrias del parque atraviesan y la radicación, el empresario señala que “las empresas aquí son industrias nacionales, lo cierto es que están sufriendo las consecuencias de la economía de los últimos dos años en los que el conjunto de la industria pequeña no ha sido favorecida en nada y la apertura de importaciones las ha perjudicado enormemente”, dice el empresario.
Sobre las ventajas y beneficios de instalación, estos son más bien los que ofrece el municipio en materia de construcción por ser esta Zona Industrial, pero el trato personal y la funcionalidad que ofrecen a cada empresa que se radica tanto para poder crecer como para achicarse, si es necesario, son también virtualmente beneficios y que certifican la visión de ser un espacio donde las empresas nacen, se desarrollan y crecen. “Es importante poder crecer, pero en los casos en que hay que achicarse, al ser el trato directo y personal, ofrecemos alternativas que a veces no puede ofrecer un martillero; acá estamos viendo el fenómeno cotidiano de la empresa y si vemos que está pasando un momento con problemas les proponemos, por ejemplo que ceda técnicamente parte del galpón; eso les da la posibilidad de oxigenarse y pasar el mal momento. Son variantes que ofrecemos que no saca fuera del común denominador del alquiler de inmuebles industriales”, dice Comi.
También destaca como fortaleza el que las empresas que se instalan no poseen gastos adicionales, no se pagan expensas comunes sólo un proporcional de los impuestos que corresponde a cada inmueble, también se ofrecen alternativas en materia de seguridad a través de una empresa radicada en el parque. “Tratamos de acompañar a la empresa con sus necesidades reales. Eso influye porque la gente se siente cómoda, no se siente presionada; no tiene que afrontar todos los meses una expensa, por ejemplo. Tenemos además calles internas, accesos comunes; nos ocupamos de todo el mantenimiento estético en el predio, los espacios que están libres se mantienen con el pasto cortado. La limpieza integral no se carga al cliente. Sí, cada empresa es responsable del predio que ocupa no puede estar el pasto crecido o basura, pero esto está previsto en los contratos: el cuidado de cada ambiente Industrial debe ser correcto”, señala el empresario.
Sobre la visión del desarrollo, se identifica como “una empresa que está al servicio de la industria en todo concepto: en el armado de desarrollos a pedido conforme el requerimiento de los clientes. Es una variante muy interesante para que el que busca desarrollar su industria y no tiene el capital suficiente como para encarar compra y construcción de un nuevo edificio industrial. Nosotros le damos al terreno, le hacemos el edificio y le cobramos un valor lógico de plaza; y ahí está la viabilidad de poder desarrollarse”, concluyó el empresario.