La cultura empresaria viene siendo objeto de diversas interpelaciones por parte de la sociedad que en virtuosas excepciones genera modelos de gestión admirables. Es el caso de las empresasB que recogen el guante de los desafíos de un mundo sustentable. Firmas de varios tipos y sectores trabajan con firmes valores considerando el triple impacto -económico, social y ambiental- como su razón de ser, lo que les significa certificaciones internacionales de calidad, como el caso de Posada de la Aguilas de Barrio Uno, Ezeiza.
Ese compromiso se manifiesta en este caso, en un emprendimiento con varios años de trayectoria y un probado compromiso con su comunidad de enclave, que brinda un especial servicio a pasajeros del país y del extranjero inspirados en la idea de ofrecer “un lugar de descanso para los que vuelan”.
Posada de las Águilas es el primer Hotel con el que nos podemos encontrar al salir del Aeropuerto Internacional de Ezeiza, a tan solo cinco minutos.
Opera desde hace algo más de 20 años con el propósito de la familia propietaria y gerenciadora de hacer sentir a sus huéspedes como en Su Casa y acompañarlos en su experiencia de viaje “de manera integral, cálida y asistida las 24 horas”.
Por medio de una llamada o un contacto por whatsapp el equipo de Posada de las Aguilas, está listo para ir a buscarnos a nuestra llegada, recibirnos con nuestro vehículo, que ofrecen “quedará al resguardo en el estacionamiento privado”.
Desde la empresa plantean que además de alojamiento se ocupan de “coordinar y llevar en el horario que el huésped lo precise con vehículos propios hasta el aeropuerto, con un rico y completo desayuno previo al traslado y armado a la medida de las preferencias de cada viajero”.
Desde Posada de las Águilas afirman que han sido “el primer Hotel en Argentina en obtener el certificado de Empresa B, un sello de calidad internacional en materia de Triple Impacto: Económico, Social y Ambiental, otorgado por Sistema B Argentina.
Se sumó a una comunidad de más de 3500 empresas en el mundo que buscan desde su propio negocio, comprometerse en sus prácticas diarias, aportando valor en aspectos sociales, ambientales y económicos en su comunidad.
Entienden que el éxito económico está ligado al bien común, para ello consideran que toda reinversión, siempre debe ir en ese sentido.
Modificaron sus estatutos para que la Posada lleve en su ADN el compromiso de hacer de estas prácticas algo permanente e inmodificable. Entienden que la transparencia tanto en lo económico como en la responsabilidad fiscal, son los pilares fundamentales para poder lograrlo.
La mayor apuesta ambiental fue lanzada en junio con el Proyecto Rebrote, iniciativa propia, destinada a producir 1000 árboles por año y reforestar con árboles nativos su zona y alrededores. Para ello, generaron un fondo de dos dólares por cada habitación vendida. El mismo es utilizado para patrocinar acciones de forestación, en conjunto con municipalidad, asociaciones vecinales dentro del partido de Ezeiza y el corredor verde de Canning.
Eligieron poner el foco en las mejoras de su huella de carbono, manejo y reciclado de residuos, los cuales redujeron en más de un 50 por ciento. Asumieron el compromiso de Huella Carbono 0, persiguiendo como objetivo alcanzarlo el 2022.
Generaron un procedimiento de separación interna de residuos, asesorados por el Ecopunto de Barrio Uno, manejado por un grupo de mujeres en situación de vulnerabilidad, invirtieron en dispensers para minimizar el uso de envases descartables. Inauguraron su propia estación de reciclado, compostan gran parte de los orgánicos y el resto es desechado en bolsas biodegradables. Gran parte de los productos de limpieza y perfumería son de líneas orgánicas. Redujeron el consumo de energía eléctrica utilizando lámparas led y ante la renovación de equipos, buscan tecnologías de menor consumo.
Con respecto al aporte social, el principal objetivo es la posibilidad de mejora de las condiciones laborales de sus colaboradores, para ello ofrecen oportunidades laborales a personas con barreras, realizan capacitaciones periódicas, acompañan y colaboran en el crecimiento personal, generan circuitos formales para que todos estén informados de cambios y novedades, además de contar con un manual de procedimientos en cada sector.
El clima interno es muy importante y para eso ofrecen un canal para denunciar cualquier tipo de abuso o mal trato para mantener una comunicación activa multidireccional, y de esa manera garantizar el bienestar de todos sus colaboradores.
Para La Posada, el rol que desempeña en la comunidad es muy importante, y para eso genera vínculos de trabajo en red con proveedores locales, como así también apoya entidades benéficas y sin fines de lucro en la zona Ezeiza y alrededores.
