Así lo han manifestado la Confederación Argentina de la Mediana Empresa, al manifestar su «indignación porque los locales de grandes cadenas siguen ofreciendo productos que no son de primera necesidad», esto, aseguraron plantea «una desigualdad con las pymes comerciales de barrio que deben permanecer cerradas por la cuarentena».
Ante este escenario, la CAME ha señalado que evalúan una denuncia en Defensa de la Competencia «por el trato desleal que están sufriendo los pequeños comerciantes de todo el país».
En este sentido, alertan que el decreto presidencial que permite seguir operando a los supermercados, no les limita a vender úncamente productos esenciales, mientras que los comerciantes de electrodomésticos, indumentaria, juguetería, librería, blanquería, marroquinería, calzados, artículos de bazar y para el hogar, entre otros rubros, «están haciendo un gran esfuerzo económico para subsistir ante el aislamiento social, preventivo y obligatorio, acumulando deudas», señalan desde la entidad empresaria.
Además han criticado que «las grandes cadenas están ofreciendo descuentos especiales de productos aprovechando la circunstancia, mientras que en la última medición de CAME las ventas minoristas retrocedieron un 57,6% en abril, más aún los rubros que permanecieron en cuarentena tuvieron una baja promedio de 75%».
Asimismo, han señalado que en varios municipios del país se ordenó que los hipermercados no puedan ofrecer a la venta artículos que no sean los estrictamente señalados como esenciales, «justamente procurando poner un freno a la competencia desleal. Pero igualmente esto continúa sucediendo en gran parte de los distritos con restricciones a locales comerciales pymes», sostuvieron. De acuerdo a los datos ofrecidos por la entidad, en abril el 94,5% de las pymes relevadas no pudieron cubrir sus costos operativos.